
y de que aún frotando no entre en calor, de que no me toque una primitiva liberadora que asesine la hipoteca sin compasión, de no comprender tanta estulticia a mi alrededor, de no saber qué decir cúando alguien me pregunta "estás casada"?...
Esencialmente mis hartazgos no suelen ser tan mezquinos, hay cosas mucho más importantes, pero me afectan menos, y a veces, - y esto es algo que se aprende con la edad- hay que ser un poco egoista.
Ayer aprendí una palabra. PERIGUAYO. Creo que la ví en el blog de Pedro Almodovar. Periguayo... es la adaptación al castellano de "Party Watcher"... o lo que sería lo mismo, el que va a las fiestas a mirar, el gordo del guateque, la fea... y llego a la conclusión de que tod@s llevamos un Periguayo de esos dentro. Lo que mola es darte cuenta cuando has dejado de serlo, o lo que es aún más fascinante, cuándo aún siéndolo, te sientes como una dama de hielo inalcanzable y divina en mitad de la fiesta... aunque esa sensación apenas dure un instante.
Los Periguayos movemos el mundo, mientras los demás posan para Vanity Fair...
Esencialmente mis hartazgos no suelen ser tan mezquinos, hay cosas mucho más importantes, pero me afectan menos, y a veces, - y esto es algo que se aprende con la edad- hay que ser un poco egoista.
Ayer aprendí una palabra. PERIGUAYO. Creo que la ví en el blog de Pedro Almodovar. Periguayo... es la adaptación al castellano de "Party Watcher"... o lo que sería lo mismo, el que va a las fiestas a mirar, el gordo del guateque, la fea... y llego a la conclusión de que tod@s llevamos un Periguayo de esos dentro. Lo que mola es darte cuenta cuando has dejado de serlo, o lo que es aún más fascinante, cuándo aún siéndolo, te sientes como una dama de hielo inalcanzable y divina en mitad de la fiesta... aunque esa sensación apenas dure un instante.
Los Periguayos movemos el mundo, mientras los demás posan para Vanity Fair...
No hay comentarios:
Publicar un comentario