Las palabras de compromiso, los besos vacíos, los deseos que no se desan... me pongo la máscara para fingir que no veo la paja en el ojo ajeno y ocultar mi viga, que seguro que la hay. Los ojos que ves no son ojos porque tú los veas, son ojos porque te miran, pero hay cada vez menos gente dispuesta a mirar a los ojos. Tantas cosas se pueden ver en una mirada!
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